Entrada libre
DIRECTOR DE LAS JORNADAS
Dr. José Luis Micol Molina. Catedrático de Genética, Universidad Miguel Hernández
INTERVIENE:
Dr. Javier Sampedro Pleite. Periodista de «El País»
Sampedro define el ADN como un texto al que le falta el análisis sintáctico
R. A. FRAILE
El lenguaje puede expresar todas las ideas posibles gracias a la utilización de niveles combinatorios, una teoría con la que el biólogo y periodista Javier Sampedro explica «los prodigios» de la estructura del ADN que define como «un texto literal que está descrito pero que faltan décadas para que se descifre. El genoma está pero hay que hacerle el análisis sintáctico».
En la conferencia «Lingüística del ADN» que ayer ofreció en el Club INFORMACION en el marco de la semana científica sobre la estructura de la doble hélice que organiza la Universidad Miguel Hernández de Elche, Sampedro propuso que «el poder del ADN para fabricar un ser humano se debe a la misma razón que el poder del lenguaje para codificar el mundo».
En su opinión los fonemas, sílabas, palabras o frases son al lenguaje lo que los tripletes, exones, genes o módulos al ADN. Sampedro asegura que la relación entre lingüística y genética es clara porque «en ambos casos y a cada paso jerárquico se produce una explosión combinatoria». Esta relación no la considera original porque ya la plantearon científicos como Bellido o más recientemente la académica de la Lengua Margarita Salas.
Por otra parte, Sampedro apuntó que el divorcio existente entre científicos y sociedad se debe a los problemas que tienen los investigadores para transmitir sus avances con un lenguaje llano, una evidencia que es el reflejo, a su juicio, de «la división nefasta entre letras y ciencias».
No obstante aclaró que afortunadamente hay excepciones como los descubridores de la estructura del ADN, Jamey Dewey Watson y Francis Compton Crick, que han demostrado una «claridad nítida» para explicar sus investigaciones o el propio Darwin «cuya obra está escrita para que la entienda cualquiera».
José Luis Micol Molina, director de la semana científica que se celebra en el Club INFORMACION para conmemorar el 50 aniversario del descubrimiento del ADN, presentó al ponente como el «mejor periodista científico» y de él destacó la capacidad de expresar con claridad asuntos complejos. No en vano, Javier Sampedro, se licenció en Biología y participó en varios proyectos científicos en el Centro de Biología Molecular de Madrid y en Cambridge durante diez años. Sin embargo su escasa vocación de científico y el convencimiento de que «la vida es corta» le llevó a hacer un master en Periodismo en la Universidad Autónoma de Madrid tras el que se incorporó al diario «El País», como redactor de Sociedad. Comentaba ayer que antes de pasar a la sección de Ciencia y Sanidad «y de acabar volviendo por caminos tortuosos a su pasado» conoció bien los secretos de la Feria de Sevilla y de la Semana Santa de esta ciudad.