MINI YO S.L. y TENGO UNA VIDA
de los artistas Pablo Bellot y Eduardo Infante
sobre LOS DERECHOS DE LOS TRABAJADORES
Horario de visita: de lunes a viernes de 17.30 a 21.30 horas; sábados, domingos y festivos de 11 a 14 horas
Exposición abierta hasta el 29 de septiembre
BELLOT E INFANTE ANALIZAN LOS DERECHOS DE LOS TRABAJADORES
SERGIO ILLESCAS
Pasar por el aro» es lo primero que tendrán que hacer los que quieran entrar a la exposición que los alicantinos Eduardo Infante y Pablo Bellot presentan esta tarde, a las 20 horas, en el Club INFORMACION de Alicante. Y es que estos dos jóvenes artistas han instalado en la entrada de su muestra un aro metálico de 2 metros de diámetro ?que recuerda al filme «Stargate»?, con el que intentan hacer un guiño al tema que abordan con sus creaciones: los derechos de los trabajadores.
Aunque ambos tienen claro que sus obras conforman una instalación conjunta, cada una de sus colecciones por separado se denomina de manera diferente. La de Pablo Bellot, de 29 años, se titula «Mini Yo S. L.», en la que, inspirado por el diminuto personaje del filme «Austin Powers 2», presenta una serie de personajes que reflejan esos seres malignos y condensados que todos llevamos dentro. Estos «miniyoes» los desarrolla desde hace 3 años pero para esta exposición los ha adaptado al tema que abordan, creando una serie de artistas parásitos ?«payasitos»? y otra de pancartistas, «con carteles de denuncia en blanco, ya que cada uno protesta según sus deseos». El papel y el acrílico son los dos materiales que utiliza sobre formatos diminutos y de gran tamaño, para representar a estos seres irónicos y agresivos. Por su parte, Infante muestra su obra «Tengo una vida», en la que a través de carpetas de oficina y colores pastel recrea informaciones inconexas de sueños, recuerdos, ilusiones… «que, en definitiva, reflejan el paso del tiempo; de cómo pasamos a ser esclavos de nuestros trabajos y aparcamos nuestros anhelos», sostiene el artista. Tanto Infante como Bellot, que ya presentaron esta exposición en la Sala Aifos de la Universidad de Alicante, tienen claro que entre sus objetivos no estaban los de dar mensajes didácticos o moralistas. «Simplemente queremos contar algo sincero y perturbar al espectador», dicen.
ARTE BIEN EMPLEADO
SERGIO ILLESCAS
Más de un centenar de personas cruzaba ayer
el umbral, a modo de aro gigante, de la exposición que presentaban en el Club INFORMACION los jóvenes artistas alicantinos Eduardo Infante y Pablo Bellot, con la que han querido reflexionar sobre los derechos de los trabajadores dejando a un lado el consejo fácil o el moralismo. El vicerrectorado de Extensión Universitaria de la Universidad de Alicante y el Consejo de la Juventud apadrinan esta muestra.
Perturbados y reflexivos, tal y como Pablo Bellot y Eduardo Infante deseaban, se encontraron los más de cien espectadores que ayer visualizaron la exposición que fusionaba las colecciones «Mini Yo S. L.» y «Tengo una vida» de estos dos artistas alicantinos. Dicha muestra partía de una idea clave: los derechos de los trabajadores.
Las láminas de papel pintadas en acrílico de Bellot mostraron a los asistentes todos esos «miniyoes» ?seres malignos y condensados que todos llevamos dentro? que, en este caso, representaban artistas parásitos ?«payasitos»? y pancartistas, «con carteles de denuncia en blanco, ya que cada uno protesta según sus deseos», explica Bellot.
Una serie de carpetas de oficina alineadas cubrían otras zonas de la sala, decoradas con dibujos ?con ciertos matices manga y en tonos pastel? que representaban informaciones desligadas sobre recuerdos, sueños e ilusiones. Todas ellas conformaban la obra de Eduardo Infante, en la que indaga sobre «cómo pasamos a ser esclavos de nuestros trabajos y aparcamos nuestros anhelos a medida que va pasando el tiempo». Tras la presentación de la exposición y algunas risas de los asistentes tras pasar por el aro metálico, que a modo de ironía se encontraba en la entrada de la sala, Infante señaló a este diario que «la gente al principio se muestra algo desconcertada cuando se topa con todas las piezas pero, poco a poco, como por ciencia infusa, encuentra el nexo que lo une todo».
