DIRIGIDA POR JIRÍ MENZEL
ÓSCAR A LA MEJOR PELÍCULA EXTRANJERA DE 1967
PRESENTA:
JOAQUÍN QUÍLEZ FORTEZA. Responsable del Taller Literario del Secretariado de Cultura de la Universidad de Alicante
SINOPSIS
Una de las obras maestras del cine checoslovaco de los años sesenta, que combina la historia central con una mirada sensible de la vida cotidiana en la que en la pequeña estación, un joven aprendiz sigue los pasos de su padre, ferroviario retirado y empieza a trabajar en la compañía ferroviaria como aprendiz de controlador. Milos, el protagonista, tendrá que madurar rápidamente y afrontar su primer asunto importante.
FICHA
Duración: 93 minutos
Año: 1966
Género: Comedia / drama
Nacionalidad: Checoslovaquia
Director: Jirí Menzel
Música: Jirí Sust
Fotografía: Jaromir Sofr (B&W)
Guión: Jirí Menzel & Bohumil Harabal
Argumento: Bohumil Harabal
Actores: Váciav Neckár, Josef Somr, Vlastimil Brodsky, Vladimir Valenta, Alois Vachek, Ferdinand Kruta, Jitka Bendová.
JIRÍ MENZEL
Jirí Menzel nació el 23 de febrero de 1938 en Praga como hijo del conocido escritor y periodista, Josef Menzel. Su camino hacia el séptimo arte no fue directo, puesto que en un principio Menzel deseaba seguir los pasos de su padre y ser periodista. Más tarde llamó su atención el teatro, sin embargo, sus empenos por ingresar a la Academia de Artes Dramáticas terminaron – hoy en día ya podemos decir por suerte – con un gran fracaso.
Jirí Menzel Jirí Menzel se dirigió a la famosa Academia de Cine de Praga, no obstante, después de tres anos de estudios, por poco fue expulsado por perezoso. Jirí Menzel pudo continuar sus estudios en la Academia gracias a la intervención de uno de sus profesores, conocido director de cine, Otakar Vávra.
Menzel debutó en 1965 con el cuento fílmico “La muerte del senor Baltazar”, que formó parte de la película basada en la novela del mismo nombre del famoso escritor checo, Bohumil Hrabal, titulada “La perla en el fondo”. Un ano después, es decir, en 1966, Jirí Menzel rodó su primer largometraje, cuyo guión también se basaba en una novela de Bohumil Hrabal y que, para sorpresa de muchos, marcó uno de los éxito más grandes de la cinematografía checoslovaca a nivel internacional.
Sin lugar a dudas, ni el propio Menzel había podido imaginar en aquel entonces que su verdadero debut fílmico titulado “Trenes rigurosamente vigilados”, sería galardonado con el premio Oscar para la mejor película extranjera. Dicho film obtuvo además un sinnúmero de premios cinematográficos nacionales y extranjeros.
Las altas cualidades artísticas de Menzel quedaron plasmadas en su siguiente película “Caprichoso verano”, de 1967, basada en la poética novela del escritor checo, Vladislav Vancura. Lo interesante es que el propio Menzel despempenó en dicha excelente adaptación también uno de los papeles principales.
Jirí Menzel (derecha) durante el rodaje de Trenes rigurosamente vigilados No obstante, ni los éxitos internacionales impidieron al régimen comunista prohibir la película de Menzel, “Alondras en el alambre”, rodada en 1969, que con un sutil trasfondo político describía la situación del país bajo el régimen comunista. Esta obra estaba basada en la antología de cuentos de Hrabal que lleva por título “Anuncio de una casa donde ya no quiero vivir”. Inmediatamente después del rodaje se prohibió la proyección de esta película en la Checoslovaquia de entonces, ocupada por los tanques soviéticos, razón por lo que no pudo ser estrenada hasta después de los cambios democráticos de noviembre de 1989. El régimen comunista prohibió no sólo la proyección de la película en cuestión, sino también las actividades artísticas de Menzel. De este modo, el ya famoso director de cine fue obligado a tomarse una pausa laboral hasta 1974.
En los anos 80, Menzel rodó otras películas, basadas en los libros de su escritor predilecto, Bohumil Hrabal. Así surgieron los excelentes “Tijeretazos” y “Las fiestas de las campanillas blancas”. Su comedia de 1985, titulada “Mi aldeita”, fue nominada al Oscar como mejor película extranjera. Después de los cambios democráticos de 1989, Jirí Menzel rodó dos películas basadas en las piezas teatrales de Václav Havel, tituladas “Audiencia” y “La ópera de cuatro cuartos”, así como el exitoso largometraje de 1993, “La vida y las increíbles aventuras del soldado Ivan Conkin”.
En una entrevista, publicada hace pocos meses por una revista nacional, Jirí Menzel afirmó que últimamente siente cierto desequilibrio psíquico, explicando al respecto lo siguiente: “En el curso de mi vida en el régimen totalitario yo tenía cierta visión, es decir, tenía entendido dónde se encuentran los límites entre lo posible y lo imposible. Sin embargo, hoy en día me doy cuenta que muchas cosas podrían ser posibles, pero a pesar de ello, no lo son.
Por ejemplo, que este país podría ser un jardín de las delicias, pero no lo es, porque mucha gente trata de aprovecharse y apoderarse de todo lo que puede. Reconozco que en el país nacen muchas cosas buenas, pero a mí me saltan a la vista constantemente más bien las cosas malas”, afirmó Jirí Menzel, agregando: “Por ahora no pienso dedicarme al rodaje de películas puesto que, con excepción de la novela de Hrabal “Yo que he servido al rey de Inglaterra”, ningún tema atrajo mi atención. Por esta razón prefiero dedicarme al teatro.”
Expliquemos al respecto que el reciente pleito entre Jirí Menzel y el director de cine, Karel Kachyna en cuanto a los derechos sobre el rodaje de la película según la novela de Bohumil Hrabal, “Yo que he servido el rey de Inglaterra”, terminó sin resultado alguno.
Jirí Menzel es miembro de la Academia norteamericana de Artes y Ciencias Cinematográficas, uno de los fundadores de la Sociedad de Cine Europea y es uno de los galardonados con la Arden de arte y literatura de Francia.
