FESTIVAL DE CINE DE MÁLAGA 2009
SECCIÓN OFICIAL

Dirigida por LUCÍA PUENZO

Con INÉS EFRON, EMME, CARLOS BARDEM, PEP MUNNÉ

SINOPSIS

Lala, una adolescente que vive en el barrio más exclusivo de Buenos Aires, está enamorada de la Guayi, la mucama paraguaya de 20 años que trabaja en su casa. Sueñan con irse a vivir juntas a Paraguay, a orillas del lago Ypoá. El asesinato del padre de Lala apura sus planes.

Este es el punto de partida que apura la huída en la ruta que une el norte de Buenos Aires con Paraguay. Mientras Lala espera a su amante en Ypoá, reconstruyendo su pasado (el misterio de su embarazo y la leyenda de un niño pez que guía a los ahogados hasta el fondo del lago), la Guayi es detenida en un instituto de menores. Ella también esconde un crimen en su pasado

Lucía Puenzo escribió El niño pez, su primera novela, a los 23 años. Fue publicada enpor Beatriz Viterbo en el 2004 (Primera Edición) y en el 2008 (Segunda Edición). En el 2009 será publicada en Francia, Alemania, Inglaterra, Italia, Brasil y Estados Unidos.

Dirección y guión: Lucía Puenzo
Países: Argentina, España y Francia
Año: 2009
Duración: 96 minutos
Género: Drama
Interpretación: Inés Efron (Lala), Mariela Vitale (la Guayi), Pep Munné (Brönté), Arnaldo André (Sócrates Espina), Carlos Bardem (Pulido), Diego Velázquez (Vasco), Sandra Guida (Felicitas), Julián Doregger (Nacho), Ailín Salas, Paloma Contreras (Chapulina)
Producción:Luis Puenzo y José María Morales
Música: Andrés Goldstein, Daniel Tarrab y Laura Zisman
Fotografía: Rodrigo Pulpeiro
Montaje: Jacobo Quadri
Dirección artística: Mercedes Alfonsín
Vestuario: Julio Suárez

CINE – CRÍTICA
ANTONIO DOPAZO

Es una aportación personal y distinta al cine argentino actual, con planteamientos singulares, aunque está por debajo de la anterior propuesta de la realizadora y guionista Lucía Puenzo, «XXY», su sorprendente y magnífica «ópera prima». Sobre la base de un libro propio, ha vuelto a introducirse en esferas delicadas y complejas, las de un sexo contemplado desde posturas nada convencionales con protagonistas sumamente jóvenes. No sólo eso, aquí ensaya, incluso, el cine de género, que es su apuesta menos brillante, recurriendo a elementos del cine negro. Presentada en el festival de Berlín, la coproducción española se asienta en la presencia de Pep Munné y Carlos Bardem. El mayor inconveniente de la cinta fluye del afán de modificar, de forma artificial, su estructura narrativa, recurriendo a subvertir el factor tiempo, algo que puede dar su juego en el marco policiaco pero que resta intensidad dramática y, sobre todo, emocional a la trama. Estamos ante una historia de amor prohibida por la sociedad, la de una chica, hija de una familia acomodada argentina, y su asistenta, una humilde paraguaya.