Intervienen
Ignacio Cembrero. Periodista y escritor
Basel Ramsis. Cineasta egipcio
Sirin Adlbi Sibai. Investigadora en el Taller de Estudios Internacionales Mediterráneos en la Universidad Autónoma de Madrid
Ignacio Álvarez-Ossorio Alvariño. Profesor titular de Estudios Árabes e Islámicos de la Universidad de Alicante
Presenta
Yolanda Parrado Marcos. Directora de Casa Mediterráneo y socióloga
Modera
Jordi Sánchez Navas. Director del Club INFORMACIÓN
EL LÍDER DE LAS REVUELTAS DE EL CAIRO ANALIZA CON EXPERTOS LA SITUACIÓN EN LOS PAÍSES ÁRABES
El Club INFORMACION, situado en la avenida Doctor Rico, 17 de Alicante, acoge esta tarde, a partir de las 20.00 horas la mesa redonda «De Túnez a Egipto: tiempos de cambio en el Mediterráneo», en la que particpa el cineasta egipcio y uno de los dirigentes de la revuelta de la plaza de Tahrir en El Cairo, Basel Ramsis. El acto, con entrada libre limitada al aforo del local, ha sido organizado por Casa Mediterráneo.
Ramsis estará acompañado por el periodista y escritor Ignacio Cembrero, la investigadora del Taller de Estudios Internacionales Mediterráneos en la Universidad Autónoma de Madrid, Sirin Adlbi Sibai, y el profesor titular de Estudios Árabes e Islámicos de la Universidad de Alicante (UA), Ignacio Álvarez-Ossorio.
Cembrero es autor del libro Vecinos alejados: los secretos de la crisis entre España y Marruecos y en la actualidad realiza la cobertura informativa y diversos análisis sobre los conflictos en el magreb para el diario El País.
Los ponentes analizarán los últimos cambios acaecidos en el norte de África y las razones y detonantes que han movilizado al pueblo tunecino y egipcio para acabar con las dictaduras de los regímenes de Ben Alí y Hosni Mubarak, respectivamente.
Los participantes debatirán también sobre el papel de la sociedad civil, el proceso de transición y el futuro de estos países y del resto de las naciones árabes en las que se están registrando protestas ciudadanas.
La mesa redonda, será presentada por la directora general de Casa Mediterráneo, Yolanda Parrado, y moderada por el director del Club INFORMACION, Jordi Navas.
UNA REVOLUCIÓN CON INTERROGANTES
PINO ALBEROLA
Es el acontecimiento más importante de los últimos años y muchos expertos no dudan en equipararlo a la caída del muro de Berlín o a la desintegración de la URSS. La revolución que viven países como Túnez, Egipto o Libia abre un sinfín de interrogantes cuya resolución marcará un antes y un después en la historia de la zona y a sus relaciones con la UE. Con el objetivo de analizar estos procesos revolucionarios y sus consecuencias, el Club INFORMACIÓN acogió ayer por la tarde, organizada por Casa Mediterráneo, la mesa redonda «De Túnez a Egipto: tiempos de cambio en el Mediterráneo». En ella tomaron parte Ignacio Álvarez-Ossorio, profesor de Estudios Árabes e Islámicos de la Universidad de Alicante; Basel Ramsis, cineasta egipcio afincado en España y que participó en las revueltas de su país contra el régimen de Mubarak; Sirin Adlbi Sibai, investigadora del Taller de Estudios Internacionales Mediterráneos en la Universidad Autónoma de Madrid e Ignacio Cembrero, periodista y escritor.
Numeroso público asistió a este debate que abrió Ignacio Álvarez-Ossorio, quien se felicitó por estos cambios «que ponen fin a regímenes autoritarios que se perpetuaban desde hace años». Para el profesor de la UA, estos países guardan similitudes «como el tipo de gobierno, la situación económica y la gran cantidad de jóvenes que conforman su sociedad». Jóvenes que han encabezado unas revueltas «en las que las redes sociales han sido determinantes y en las que se pide más libertad y democracia, no que se instaure un estado islámico o que se imponga la sharia»
Para Sirin Adlbi Sibai, la revolución «no ha hecho más que empezar» y sus consecuencias «son de mayor calado de lo que en un principio parece». En este sentido, estos procesos «cuestionan las bases del sistema de relaciones internacionales». Sirin Adlbi Sibai se mostró esperanzada en que «presenciemos el comienzo del fin del sistema internacional basado en la esclavitud de una parte del mundo en provecho de la otra y en la justificación del mantenimiento de dictaduras en el tercer mundo». En este sentido, «el islam siempre ha sido el otro por antonomasia. Siempre ha sido el oscuro, el retrógrado y esto ha justificado invasiones y apoyos a regímenes antidemocráticos».
Por su parte Basel Ramsis narró a los asistentes cómo se desarrolló la revolución en Egipto, con la plaza de Tahrir como principal eje de unas protestas «que no han tenido un único protagonista». En este sentido, en los acontecimientos de Egipto «han tomado parte todos los colectivos». El cineasta recordó la anécdota de un taxista que le contó cómo participó en la revuelta haciendo lo que mejor sabía hacer «quemando coches de policía y llevando gratis a la gente de la plaza».
Por último, Ignacio Cembrero habló de los interrogantes que se abren tras estas revoluciones. «Durante los próximos años nos vamos a tener que acostumbrar a vivir cerca de una zona altamente inestable, ya que la situación tardará en normalizarse». El desprestigio de Europa, y en particular de Francia, por apoyar a estos regímenes, es otra de las consecuencias que, a juicio de Cembrero, están trayendo estas revoluciones.
Aunque uno de los aspectos más alarmantes, señala, es el aumento del precio del petróleo. «Esto no ha hecho más que empezar. Habrá una subida histórica que hará que acabemos viviendo a oscuras».
ENTREVISTA A BASEL RAMSIS
«EN LIBIA, A EE UU Y A EUROPA SÓLO LES PREOCUPA LO QUE SUBA EL PETRÓLEO»
Por PINO ALBEROLA
¿Cuál fue su participación en la revolución de Egipto que acabó el pasado día 11 con el derrocamiento de Mubarak?
Cuando se iniciaron las revueltas yo estaba en mi casa de Madrid. La revuelta empezó el 25 y yo llegué a El Cairo el 31. Desde que llegué y hasta el final de la revolución estuve en la plaza Tahrir con la gente que participaba.
¿Son los jóvenes los grandes protagonistas de este movimiento?
No es una revolución de jóvenes. Ellos la han empezado y han tenido un papel muy importante en su desarrollo, pero es una revolución popular en la que han participado todas las clases y todos los colectivos sociales egipcios. Ha habido un poco de juego por parte del régimen egipcio de decir que esta revolución estaba hecha por los jóvenes en el sentido de que «son rebeldes, podemos recoger sus reivindicaciones, cumplir una parte de ellas y con eso ya acaba todo».
¿Cómo cree que acabará este proceso que se ha iniciado en su país? ¿Teme un giro hacia el radicalismo islámico?
Hay miedo en los círculos de poder políticos europeos y norteamericanos de que el país caiga en manos de los islamistas. Yo no temo esto, porque si los islamistas entran en el juego democrático y lo aceptan no son enemigos. Lo más importante es que todos respetemos el juego democrático. Por otro lado, estamos viviendo una revolución hacia la democracia en la que está participando gente que era ajena a la política, pero también corrientes políticas, una de ellas los islamistas, pero también la izquierda, los liberales…
¿Qué le parece lo que está ocurriendo en Libia?
Es una masacre que la UE y EE UU están tomando de una manera ligera y cobarde. Sólo están pensando en los dos céntimos que va a subir el precio del litro de petróleo sin pensar que hay miles de personas que mueren en la calle.
