CICLO CEREBRO Y SOCIEDAD
Inauguración
Jesús T. Pastor Ciurana. Rector de la Universidad Miguel Hernández de Elche
Francisco Sánchez. Director del Club INFORMACIÓN
Juan Lerma. Director del Instituto de Neurociencias
Ponentes de la mesa redonda
Adela Cortina. Catedrática de Ética de la Universidad de Valencia. Miembro de la Real Academia de las Ciencias Morales y Políticas
Carlos Belmonte. Catedrático de Fisiología de la UMH. Ex director del Instituto de Neurociencias. Ex presidente de la International Brain Research Association y miembro de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales
Modera
Juan Lerma. Director del Instituto de Neurociencias
DEMOSTRACIONES Y EXPOSICIONES
Del 11 al 13 de marzo
Visita guiada al Instituto de Neurociencias donde se hablará sobre los aspectos funcionales y estructurales relevantes para la actividad cerebral. Estas demostraciones interactivas tratan de acercar y difundir al público en general la parte práctica y técnica de la investigación básica que realiza el Instituto de Neurociencias.
SEMANA MUNDIAL DEL CEREBRO
La neurociencia está llamada a ser la ciencia del siglo XXI, ya que está desentrañando el funcionamiento de un órgano crítico para ser humano, el cerebro. Con el conocimiento de las propiedades plásticas, creativas y emocionales del cerebro, la neurociencia está sentando las bases del entendimiento de aspectos tan complejos como la conciencia, estando en condiciones de explicar la tendencia humana de construir sistemas morales, sociales o legales, todos ellos basados en aspectos emocionales.
El desarrollo de los implantes cerebrales y las interfaces cerebro-máquina, el uso de la imagen cerebral, la posibilidad de alterar la función cerebral con psicofármacos y la corrección de la conducta, por ejemplo, imponen planteamientos éticos que hay que analizar. Se trata de distinguir entre lo técnicamente viable y lo éticamente aceptable.
La repercusión que los avances de la neurociencia tienen en el análisis ético y moral de la sociedad y las limitaciones que la ética podría imponer sobre la aplicación del conocimiento sobre cerebro, son temas de enorme trascendencia que serán abordados en esta edición del ciclo “Cerebro y Sociedad”, con amplio tiempo para el debate.
¿SE DEBE PONER LÍMITE AL ESTUDIO DEL CEREBRO?
A. TERUEL
¿Deben ponerse límites éticos a la investigación neurocientífica? En caso de ser así, ¿dónde y por qué motivo? O, por el contrario, ¿son los avances en esta disciplina tan continuos e imparables que es la sociedad quien debe ir adaptándose progresivamente a ellos? Ésta era la disyuntiva que, a través de una mesa redonda, quiso dejar ayer en el aire el Instituto de Neurociencias de Alicante, centro mixto de la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH) y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en la apertura de una nueva edición de la Semana del Cerebro en el Club INFORMACIÓN. El objetivo era, a través de las intervenciones de los ponentes, abrir el debate entre el público en torno a esta cuestión.
La cita contó con la presencia de la catedrática de Ética de la Universidad de Valencia y miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas Adela Cortina, y del catedrático de Fisi0logía de la UMH y exdirector del Instituto de Neurociencias Carlos Belmonte. Por su parte, el actual director del citado centro, Juan Lerma, ejerció de moderador. Los participantes expusieron en primer lugar sus respectivos argumentos, dando pie al posterior debate con el público.
Cortina habló acerca de la neuroética, surgida en los últimos años como consecuencia de los avances de la neurociencia y su repercusión social, y lanzó la pregunta de «hasta dónde puede estar permitido» ese progreso. En ese sentido, planteó aspectos como posibles límites en experimentaciones que «pongan en juego la vida humana o la de los animales», así como «no generar expectativas que luego no se puedan cumplir». Al respecto, señaló que la neurociencia debe avanzar, pero «contando con la sociedad». Mientras tanto, Belmonte defendió la idea de que la continuidad en la investigación no debe ceñirse a esas cuestiones, ya que «el cerebro es una máquina compleja pero finita» y siempre requerirá de alguna mejora. Además, señaló que funciona por impulsos y «las decisiones meditadas siempre son explicaciones a posteriori» creadas por él mismo.
UN «CAMINO FIABLE» PARA EL PROGRESO SOCIAL
El rector de la UMH, Jesús Tadeo Pastor, afirmó que la inversión en investigación es «uno de los caminos más fiables» para el progreso de la sociedad, y que para ello resulta «imprescindible una financiación adecuada y una optimización de recursos». El responsable académico fue el encargado de inaugurar la decimocuarta edición en esta institución de la Semana del Cerebro, junto con el director del Instituto de Neurociencias, Juan Lerma. Este último recordó que el objetivo de estas jornadas es la «difusión de las actividades» en torno a la investigación sobre este órgano «tan misterioso como cautivador». Desde hoy hasta el jueves se llevarán a cabo en la sede del Instituto de Neurociencias demostraciones y explicaciones de carácter divulgativo.