Un film de AGNIESZKA HOLLAND
En colaboración con la distribuidora NOTRO FILMS
Entrada sólo para socios abonados del Club INFORMACION
SINOPSIS
(Diane Kruger), de 23 años, es una aspirante a compositora con pocos medios que intenta encontrar inspiración y prosperar en la capital mundial de la música, Viena. Anna, que estudia en el conservatorio de música, consigue una recomendación para trabajar en una reconocida editorial, y, tras una serie de acontecimientos inesperados, se las ingenia para conseguir una oportunidad de trabajar junto al mayor y más voluble artista vivo: Ludwig van Beethoven (Ed Harris).
Cuando, improvisadamente, el escéptico Beethoven la pone a prueba, Anna demuestra sus dotes y su especial valía para la música. El maestro decide aceptarla como copista, lo que da comienzo a una extraordinaria relación que cambiará la vida de ambos.
LICENCIAS MÁS QUE FRUCTÍFERAS
ANTONIO DOPAZO
El recurso es discutible en teoría, pero se compensa en la práctica por los resultados que ofrece y, sobre todo, porque permite un acercamiento íntimo a la figura de uno de los más grandes compositores de la historia. De este modo se pasa por alto que la película se invente un personaje de ficción, el de la joven de 23 años Anna Holtz, que se convierte en la más fiel acompañante de Beethoven en los últimos días de su vida, concretamente cuando está concluyendo la que muchos consideran su obra maestra, la novena sinfonía. Premio del Círculo de Escritores Cinematográficos en el Festival de San Sebastián, estamos ante una de las mejores cintas de una irregular cineasta polaca, Agnieszka Holland.
La calidad de los elementos formales y una excepcional banda sonora nutrida exclusivamente de piezas de Beethoven, lo que supone un acierto indiscutible, contribuyen a fijar con firmeza los sedimentos de una cinta que solo presenta algunas objeciones en el terreno dramático, que es el talón de Aquiles habitual de la realizadora. El rodaje en exteriores en Hungría, la exquisita fotografía y un vestuario impecable configuran un hermoso panorama visual. Loable el trabajo de Ed Harris, ya en su tercera película con la Holland, incorporando a Beethoven. Más sorprendente es la labor de Diane Kruger, que tras el éxito internacional de «Troya», puede afianzar aún más su futuro.