Colabora: Fundación Europa Universitas, Sol Meliá y la Asociación Provincial de Hoteles de Alicante
INTERVIENEN:
JUAN JOSÉ BADIOLA. Director del Laboratorio Nacional de Referencia sobre Encefalopatías Espongiformes Transmisibles
RAMÓN MARTÍN MATEO. Catedrático emérito de la Universidad de Alicante y consejero de Estado
FERNANDO ESCUDERO. Presidente de la Fundación Europa Universitas
JAIME PUIG DE LA BELLACASA. Director de Comunicación de Sol Meliá
PRESENTA
JOSÉ MARÍA PEREA. Periodista
BADIOLA: «SI EL BOVINO ESPAÑOL SE HUNDE HABRÁ QUE IMPORTAR CARNE SIN GARNATÍAS»
El director
del Laboratorio
Nacional de
Encefalopatías
Espongiformes Bovinas, Juan José
Badiola, advirtió en la noche del
miércoles en Alicante, durante su
intervención en la conferencia-coloquio
sobre «El mal de las vacas
locas» organizada por el Club INFORMACION,
que si el sector ganadero
español se hunde por la
falta de respuesta del consumidor,
cuando se recupere la demanda
habrá que importar carne de otros
países sin las mismas garantías
que el producto nacional. «Los
mataderos españoles son de primera
calidad, los veterinarios están
muy bien formados, responden
penalmente y no se juegan el
tipo. Les invito a visitar los mataderos
que hay por ahí», dijo.
El máximo experto nacional en
las encefalopatías espongiformes
bovinas dijo a las 400 personas
que se dieron cita en el salón Europa
del Hotel Meliá que «debemos
ser prudentes, confiar en los
sistemas de detección del mal y no
contribuir a que se hunda el sector
ganadero. El bovino nunca ha estado
tan controlado en España, la
tendencia es endurecer las medidas
e incluso hemos hablado -en
la comisión de emergencia creada
por el Gobierno- no sólo de analizar
sino de «liquidar» las vacas mayores
de 30 meses». Esta reunión,
celebrada el miércoles tras confirmar
el laboratorio que dirige el
propio Badiola siete nuevos casos,
supuso que llegara con retraso al
Club, aunque el auditorio le esperó
y le recibió con aplausos.
Badiola abordó las cuestiones
que más preocupan al consumidor
e hizo hincapié en estas ideas:
la carne y la leche no trasmiten el
mal; la retirada e incineración del
cerebro, ojos y columna vertebral
-el espinazo- de una vaca enferma
elimina el 96% de la carga infectiva
y en el porcentaje restante
entran el intestino y las amígdalas,
que se retiran buscando el riesgo
cero; que en los 89 casos descritos
en humanos no hay un factor común
en cuanto a la causa y que no
está claro que la vía infectiva sea la
alimentaria; que no se puede hablar
de epidemia en humanos porque
los casos crecen lentamente y
que también interviene el factor
genético en la resistencia o vulnerabilidad
hacia la enfermedad.
El director del Laboratorio Nacional
realizó una amplia semblanza
del prión, una proteína
«simple, hábil y maléfica, patógena
e invasiva» que elude la respuesta
inmunitaria del organismo;
e insistió en que el prión que apareció
en el bovino por ser alimentado
con harinas cárnicas de otros
animales saltó la barrera de la especie
por causas desconocidas infectando
a personas y gatos, aunque
de momento no se han descrito
casos en «conejos, cerdos o peces,
caballos o perros».
Sobre la situación en España incidió
en que ha tenido que responder
a unas medidas muy duras
impuestas por la UE, que le ha
obligado a crear 25 laboratorios de
un día para otro, y que este año
gastará 100.000 millones de pesetas
para hacer frente a la enfermedad.
En cuanto a los casos, «hemos
realizado 25.000 test rápidos
desde el 1 de enero y se han descubierto
24, es decir un positivo por
cada mil análisis. Hasta que no
hagamos 100.000 pruebas no podremos
comparar».
Badiola cree que un problema
de salud pública puede tumbar
un gobierno. «Ocurrió en Gran
Bretaña, en Alemania y en la Comisión
Europea y no se puede
descartar que en España caiga algún
ministro». En su opinión Inglaterra
fue negligente por exportar
harinas contaminadas, precisó
que la puerta de entrada del mal
en España pudo ser Portugal y defendió
a los ganaderos. «Ellos
compraban piensos legales; la responsabilidad
está en otro sitio».
«LA INCINERACIÓN DE HARINAS EN EL VERTEDERO DE ASPE DESTRUYE EL PRIÓN»
El alcalde de
Aspe, Miguel
Iborra, estuvo
presente en el
acto organizado por INFORMACION
en colaboración con la Fundación
Europa Universitas, la cadena
Sol Meliá y la Asociación
Provincial de Hoteleros, como representante
de la preocupación
que existe en el Vinalopó por la
quema de harinas cárnicas en el
vertedero aspense. Iborra, que en
su día exigió a la Generalitat garantías
de que esas harinas no llevan
material de riesgo, trasmitió a
Juan José Badiola el temor de sus
convecinos: «¿Y si las harinas,
dentro de unos años, provocan
contaminación a través de los
acuíferos?». Badiola fue contundente
al responder que «las garantías
son totales si no llevan material
de riesgo, y también aunque lo
lleven, porque si esos restos se tratan
a 133 grados más de 20 minutos
y a tres bares de presión, la garantía
de destrucción del prión es
absoluta». El director del Laboratorio
de Zaragoza quiso desmitificar
al prión. «Existe la leyenda de que
es indestructible. Es cierto que resiste
500 grados de calor seco pero
no el húmedo, y tampoco agentes
químicos como la lejía o la sosa».
Por su parte, el consejero de Estado
y ex rector Ramón Martín
Mateo, que con sus conocimientos
ilustró al público asistente hasta
que llegó Badiola, recordó que la
vida pasa por las plantas y que los
rumiantes son animales herbívoros.
«Siempre ha existido la tentación
de acelerar el proceso de engorde
de la cabaña para el consumo
humano y se ha incurrido en
algo para lo que la naturaleza no
estaba preparada. Pero no es algo
nuevo, porque Plutarco ya hablaba
de alimentar artificialmente a los
animales». También señaló que la
enfermedad no es desconocida en
España, puesto que las ovejas ya
han padecido un mal similar, el
Scrapie o «tembladera de las ovejas
» de donde, apuntó, pudo saltar
a las vacas y de ahí al humano.