TRAYECTORIA DE GANG BANG 66
Se acaban de proclamar ganadores del concurso «Tot Música» de la Universidad de Alicante. Gang Bang 66 pasa por ser una de las bandas de rocanrol revelaciones de la temporada. A pesar de ser una formación muy joven y del escaso circuito musical existente en Alicante, GB 66 posee también en su currículum el haber teloneado a formaciones de ámbito nacional e internacional -como Sugarless o Escorzo en el último certamen Muvifest de Villena o Texas Terri en su último paso de la cantante norteamericana por Alicante-. También alcanzaron la semifinal del Festival Emergenza Europa de Valencia, además de numerosos conciertos realizados por la geografía de la provincia.
Deudores de las raíces más puras del rock, entre las que podríamos citar a Led Zepellin, The Doors, The Cult o Black Crowes, aunque con un estilo personal y sólido, GB 66 ofrece en sus directos un espectáculo Glam-Rock que resucita al más escéptico. Grandes notas para una buena melodía: un batería notable, un guitarra que se parece musicalmente a Keith Richards, un bajo que encima es fanático de los Kiss, un hammond bajo las influencias de los Doors y Deep Purple y un cantante que dará mucho que hablar.
Entre sus proyectos inminentes destaca la grabación de un disco en los estudios Producciones Lorca (Murcia) tras haber ganado el certamen «Tot Música» de la UA.
GANG BANG 66 ACTÚA ESTA NOCHE EN EL CLUB INFORMACION
SERGIO ILLESCAS
Gang Bang 66, el grupo de rock más potente, pintoresco, divertido, descarado e, incluso, glamouroso de la provincia de Alicante, se da cita esta noche, a partir de las 21.30 horas, en el salón de actos del Club INFORMACION, situado, para los despistados, en la Avenida Doctor Rico, número 17. Hora y media de auténtico hard rock totalmente gratuita. Suena bien para empezar el fin de semana, pero mejor suenan ellos.
Hace alrededor de dos años se juntaron estos cinco locos de Alicante e Ibi (algunos más que otros) para concebir una banda que encauza sus canciones por tres principios fundamentales: sexo, drogas y r?n?r.
La voz rota y desgarrada del cantante y el show que lleva a cabo en cada actuación rememora a aquellos grupos que enloquecían en los setenta sobre el escenario. No menos espectacular es el sonido que destilan sus cuatro compañeros a través de una guitarra y un bajo cañero y estridente, una batería energética y un hammond encargado de poner a la banda un acertado toque rockero sentimental.
Para más grado de canallismo los músicos se reconvierten en sus actuaciones y disfrazan sus nombres con singulares apodos como: Dective Cobretti, Suzuki Samurai, Machogrande, Loki Lebowsky y Comandante Stryker.
SONIDO DE FUEGO
SERGIO ILLESCAS
El Club INFORMACION se teletrasportó ayer a los años setenta, época en la que el rock&roll se despertaba en el mundo como una auténtica forma de vida. Los encargados de dirigir a los asistentes dentro de este viaje temporal fueron los componentes del grupo alicantino Gang Bang 66, que durante hora y media destilaron sobre el escenario toda la fuerza heredada de los mitos que veneran (Deep Purple, The Cult, Aerosmith, Darkness, etcétera…) y ofrecieron un show de glam-rock a la antigua usanza.
A eso de las 22 horas se subieron a las tablas del Club. El detective Cobretti, vocalista, apareció engalanado con un sombrero vaquero, una chaqueta de cuero desgastada y unas gafas de sol que parecían sacadas de una película de «Starsky & Hutch». El cantante, desde la primera hasta la última canción, se encarnó en una de esas estrellas setenteras del rock e hizo gala de una potencia de voz aguda y estridente, que parecía rozar todos los límites de sus cuerdas vocales. Ya en la primera canción, «Sister», el vocalista parecía un componente de los Rolling Stones. El show que regaló durante toda la actuación -en el que el postureo, los movimientos espasmódicos y las pérdidas de vestimenta eran su punto de referencia- fue agradecido por el público con aplausos y gritos, en ocasiones, algo pasionales.
El resto de la banda también hizo de las suyas. Suzuki Samurai, responsable del sonido que propiciaba a diestro y siniestro el hammond, abandonó su puesto varias veces para bailar junto al cantante e, incluso, jugó al fútbol con alguno de los asistentes. En «Her comes the gang», guitarrista y bajista (Loky Lebowsky y Comandante Striker), lidiaron en una auténtica batalla sonora dándole caña a sus cuerdas. Machogrande, el más tranquilo de esta panda de tarados de la música, también sacudió con intensidad la batería y consiguió potenciar este sonido aconsejable para nostálgicos del rock.
Hubo un par de baladas como «Let?s get together», en la que estos músicos sacaron su lado más romanticón pero siempre sin perder esa actitud descarada y canalla que les identifica. En temas como «Son of a bitch» Cobretti llegó a alcanzar niveles de voz tan estridentes como los que ofrecía en sus conciertos el popular cantante de AC/DC.
El vocalista de Gang Bang 66 despidió el concierto con «Your fire», que comenzó con un sureño solo de armónica y en el que pidió al respetable que le entregaran su fuego, y con «Hell Norton», en el que el grupo propone un viaje en moto hacia el infierno.
La insistencia del público les obligó a realizar tres bises. Agradeciendo esta entrega presentaron un nuevo tema, «Fooling Yourself».