Entrada libre
Organiza: MESA INTERRELIGIOSA DE ALICANTE
MESA REDONDA
LA PAZ DESDE EL CORAZÓN DE LAS RELIGIONES
Saludo y presentación
Tejiendo la PAZ, exposición por parte de los/as representantes de las confesiones y tradiciones religiosas:
INTERVIENEN:
Comunidad Bahá´í – Zoraida García
Brahma Kumaris – Camino Martínez
Comunidad Budista – Ángeles de la Torre
Cristiana católica – José Antonio Martínez García
Cristiana evangélica Filadelfia – Juan Enrique Fernández
Comunidad Islámica – Mohamed M. Zebdeh
Comunidad Judía – Lilo Plon
COLOQUIO
Lectura del Manifiesto por la PAZ
COMBINANDO COLORES Y TEJIENDO PAZ
Este III Encuentro ha sido preparado por un equipo interreligioso, formado por personas de distintas confesiones y tradiciones religiosas, urgidas desde hace algunos años a unir esfuerzos por la Paz. Sabemos que cada confesión o tradición religiosa aporta colores y matices para pintar la Paz pero es importante sentirnos juntos/as «Combinando colores y tejiendo Paz», por eso os invitamos a construir y testificar con nosotros la PAZ.
ENCUENTRO RELIGIOSO POR LA PAZ CON LA ASISTENCIA DE REPRESENTANTES DE VARIAS CONFESIONES
Esta tarde, a las 20 horas, tendrá lugar en el salón de actos del Club INFORMACION (Avenida Doctor Rico, 17-Alicante), el III Encuentro Interreligioso por la Paz en el que intervienen representantes de distintas confesiones y tradiciones religiosas. El acto finalizará con la lectura de un Manifiesto por la Paz elaborado conjuntamente por los organizadores. La asistencia es libre.
La Mesa Interreligiosa de Alicante ha preparado este tercer Encuentro en el que se combinan las intervenciones, los momentos musicales y el coloquio con el público asistente. Zoraida García (Comunidad Bahá?i), Camino Martínez (Brahma Kumaris), Ángeles de la Torre (Comunidad Budista), José Antonio Martínez García (Cristiana Católica), Juan Enrique Fernández (Cristiana Evangélica Filadelfia), Mohameh M. Zebdeh (Comunidad Islámica) y Lilo Plon (Comunidad Judía), serán los intervinientes.
CON ESPÍRITU DE PAZ
A. PRADO
No podíamos pensar que la elección de la fecha fuera tan lamentablemente acertada» señaló el director del Club INFORMACION, José María Perea, en la introducción del III Encuentro Interreligioso por la Paz celebrado el miércoles, en el que ocho comunidades religiosas elevaron su súplica de justicia y paz en tiempos de guerra, precisamente el día en que fue bombardeado un mercado de Bagdad con víctimas mortales.
Al acto acudieron miembros de las distintas religiones, que expresaron su voluntad de colaborar para lograr el fin del enfrentamiento y mostraron, con su presencia, que las religiones no son los motores ni los culpables de ningún conflicto, como señaló Pep Buades, representante de la comunidad cristiana católica, que proclamó «cómo nos necesitamos para tejer el tapiz de la paz sumándonos a este clamor».
Buades recordó la anterior reunión de la Mesa Interreligiosa de Alicante, hace un año tras los atentados del 11-S y la guerra en Afganistán. En el encuentro del miércoles no faltó tiempo para la oración, ni música para la reflexión del público, que culminó con un cántico en castellano, árabe y hebreo. Las confesiones religiosas redactaron un manifiesto para sumar su voz «al clamor ético por la paz de tantos millones de personas» compartiendo la convicción de que «la guerra no es nunca una simple fatalidad, sino una derrota de la humanidad».
La representante de la comunidad Bahá´í, Zoraida García, destacó que «ningún intento de paz puede prescindir de la religión» por su conexión con la gente y recordó que «cada religión ha dado al mundo grandes sistemas de creencias con capacidad de perdonar, amar o creer». La comunidad instó colaborar por todas las vías a la paz y se unió «a todas las víctimas de agresiones».
Camino Martínez, de la comunidad Brahma Kumaris, incidió en que la paz es «inevitable y posible, cuando somos capaces de ir más allá de nuestras creencias» y apuntó que cada uno se influye de su experiencia de paz interna, «aún escuchando los sonidos de la guerra». A su vez, la representante de la comunidad Budista, Ángeles de la Torre, situó en la mente la raíz de todo sufrimiento y toda dicha e instó a desarrollar una «mente altruista y un buen corazón» para lograr la paz, en un proceso que comienza por uno mismo y se extiende a la ayuda a los más desfavorecidos: «Nunca invadir, abusar o menospreciar a otros».
Desde la comunidad católica, Pep Buades recordó las palabras del Papa hace un año indicando que «no hay paz sin justicia y justicia sin perdón» para reclamar la reconciliación de los pueblos y evitar las derrotas de la guerra.
Muy crítico fue David Manzanas, integrante de la Iglesia Evangélica Española, con el uso de la religión por los gobiernos implicados en una guerra. Manzanas confesó sentirse «avergonzado de cómo se habla de fallos colaterales cuando hay una masacre en un mercado», y extendió su vergüenza a que «un presidente que dice ser cristiano evangélico lleve la guerra en nombre de Dios» y «para imponer una forma de democracia, como si no hubiera otra». «Estamos hartos de que nos usen para sus guerras, sea el nombre de Dios que sea», indicó Manzanas, quien instó a ser valientes y decir «no» a «unos gobernantes que nos quieren llevar por la injusticia».
Juan Enrique Fernández, de la Iglesia Evangélica de Filadelfia, señaló en nombre de la comunidad gitana que «esta guerra tampoco la entendemos nosotros» y apuntó que, aunque «no podemos enfrentarnos a las armas ni alzar la voz en el Parlamento porque no nos dejan», la paz «está dentro de nosotros y no dejemos que nos la roben».
Mohamed M. Zebded, de la comunidad Islámica, recordó que la paz es el saludo en el Islam y dijo «no» al 11-S, al genocidio palestino y a la masacre en Irak en nombre de Alá, la tierra o la religión y apuntó que «si no somos capaces nosotros de poner paz, vendrá Jesús a ponerla».
Lilo Plon, de la comunidad judía, concluyó que el mundo ha sufrido demasiadas guerras «inútiles, con hombres, mujeres y niños mutilados vagando sin patria por el mundo», tras decir «basta ya a las guerras, las discriminaciones y las desigualdades» y pedir la paz «para el pueblo palestino, israelí e iraquí y para todas las personas que sufran agresiones».
