PROGRAMA
18.00 h.: Bienvenida y presentación del acto por Pau Blanes, director del centro coordinador «Tómbola»
18.15 h.: Ponencia a cargo de Vicente Díaz Rodríguez, inspector de Educación y profesor de la Universidad de Alicante
18.45 h.: Monólogo a cargo de RUBÉN PADILLA
«LA EDUCACIÓN ES EL ÚNICO PATRIMONIO REAL QUE TIENEN LOS CIUDADANOS»
ALBA S. SORROCHE
«La educación es el único patrimonio real que tiene la sociedad». Esta fue la idea principal que el inspector de Educación y profesor de la Universidad de Alicante (UA), Vicente Díaz, recalcó ayer durante la ponencia que ofreció en el acto de inauguración del curso de los Centros de Adultos de L´Alacantí. Además, Díaz apuntó que en este momento todos aquellos individuos que no tengan una formación cualificada «están condenados a ser carne de ERE».
El evento, que tuvo lugar ayer por la tarde en el Club INFORMACIÓN, contó con la asistencia de profesores y alumnos de ocho escuelas para adultos repartidas en distintos puntos de la comarca (Alicante, San Vicente, Mutxamel y Xixona). Todos ellos se congregaron para consagrar el inicio del curso 2012/2013, que comenzó hace justo un mes. La presentación del acto corrió a cargo del director del centro coordinador Tómbola, Pau Blanes, que resaltó la importancia de la enseñanza para adultos dada la coyuntura socioeconómica actual, la cual no es la más apropiada para asegurar un futuro digno a los más jóvenes. En este sentido, las palabras pronunciadas por Blanes fueron complementadas por Díaz, que calificó a la educación como «la gran esperanza» a la que debe aferrarse la ciudadanía. Además, el profesor de la UA aseguró que la educación es «la esencia de la evolución cultural de la ciudadanía».
Por otro lado, Díaz reivindicó el valor de la enseñanza tanto entre los jóvenes como en los mayores. El inspector de educación vino a decir que la suma de los talentos de cada individuo tiene como resultado una sociedad avanzada, competente e ilusionada en su actividad laboral pero advirtió que para llegar a este punto es necesario desarrollar las habilidades que cada persona presente de manera innata a través del sistema educativo. El ponente puso en alza la calidad del profesorado que en estos momentos imparten clases en los centros de formación para adultos. Así mismo, aprovechó la ocasión para señalar la necesidad de contar con instalaciones y materiales adecuados para conseguir que los estudiantes adquieran conocimientos de calidad. Aunque recordó que todo ello no sirve de nada si en el proceso de aprendizaje la exigencia, el esfuerzo y el tesón son inexistentes.
Durante el acto, el inspector definió los centros de adultos como «catedrales del aprendizaje» que tienen un efecto positivo sobre las personas. El evento se clausuró con un monólogo de Rubén Padilla, que amenizó el acto con un toque de humor.
