Obra ganadora del Premio de Novela Prensa Canaria 1995
INTERVIENEN:
PABLO GONZÁLEZ CUESTA. Autor de «La pasión de Octubre»
MARTA JUL REMIRO. Responsable de Promoción de Alba Editorial
ENRIQUE CERDÁN TATO. Escritor, Premio de lass Letras Valencianas
«AL INTELECTUAL LE CORRESPONDE INCENTIVAR EL PENSAMIENTO Y AL ESCRITOR LA IMAGINACIÓN»
PIRULA ARDERIUS
A la hora de hacer una valoración de los contenidos de «La Pasión de Octubre», Enrique Cerdán Tato despegó con un juego de surrealistas situaciones para situar a la audiencia en el eje de los contenidos de esta novela, que calificó de «original por muchas razones, con muchos hallazgos importantes, que está narrada desde la cultura de la imagen». Realizó Cerdán Tato una escueta referencia a la inercia de los viejos escritores de narrar sobre una cultura libresca, a diferencia de los jóvenes, impregnados por una vida veloz e influenciada por los medios audiovisuales.
Sobre estas pinceladas iniciales, Cerdán Tato destacó que Octubre-personaje puede ser cualquiera, que el relato se inicia en el tercer día de acción de la narración de una peripecia humana que critica actitudes sociales e individuales de una forma peculiar, con estilo sencillo y fluido dentro del marco de lo absurdo, con muy pocos nexos estilísticos respecto a otros precedentes literarios.
El Cronista Oficial de la Ciudad de Alicante y Premio de las Letras Valencianas, sí encontró referencia, de alguna manera, en las escenas paródicas y absurdas propuestas por los Hermanos Marx, asegurando que «La pasión de Octubre» tiene un fuerte tirón inicial, con una segunda parte muy divertida en situaciones, dentro de la vertiginosidad de una narración capaz de distorsionar, no solamente la realidad social, sino hasta la consistencia de un edificio, poniendo como ejemplo la descripción desmesurada de una dirección general de policía, o la abrumadoramente apabullante, producto de una tecnología salvaje, de un edificio inteligente.
Al hilo de la narrativa, Cerdán Tato calificó de singulares y entrañables a unos personajes, dentro de la pasión de nueve días, en los que dos de ellos no ocurre nada.
Por su parte, Pablo González comentó situando su trabajo en el terreno de la comunicación como elemento fundamental «porque siempre me tomé la literatura como un acto de comunicación que sugiere, basada en la acción, que el lector compone y rellena, muy lejos de las novelas ambientadas en espacios complejos y distantes del XIX, cuando la novela era un medio de información».
Para Pablo, hoy a la novela le queda el espacio de la caracterización psicológica de la gente y la finalidad de divertir y comunicar rápidamente, sin olvidarse de los problemas reales, esquemas y estructuras básicas, para profundizar. Aseguró que no tenían afán moralizante «porque es al intelectual al que corresponde incentivar el pensamiento y, al novelista, la imaginación».
En la presentación de esta novela también intervino Marta Jul, en representación de Alba Editorial, para hablar de los orígenes de este premio en Editorial Prensa Ibérica y en su continuidad anual.