Intervienen
Maribel Botella. Gerente de COES
Pablo Ortiz. Nutricinionista escolar de COES
Mayo Leal. Responsable de proyectos de COES
Presenta y modera
Adrián Martínez. Presidente de la Asociación para el Estudio de las Intolerancias Alimentarias y Ambientales
¿QUÉ SON LOS COESCONSEJOS?
En el Club INFORMACIÓN de Alicante se ofrecerá una charla nutricional dirigida a madres, padres, docentes y
familiares de niños en edad escolar, dentro de la campaña de información saludable denominada:
LOS COESCONSEJOS VAN AL COLE
Alimentación saludable para escolares y adultos dentro del compromiso por una alimentación saludable, que
COES tiene programado, queremos darles a conocer, consejos en alimentación desarrollados tanto por la Estrategia NAOS, como por publicaciones del Ministerio de Sanidad sobre alimentación a escolares, y la Guía de menús escolares editada por la Conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana.
Se ofrecerán consejos para una alimentación saludable y los beneficios de esta, así como la práctica de buenos hábitos en alimentación, tanto en los escolares como en los adultos para una vida sana. Además repasaremos los mitos de la alimentación.
La charla incluye un coloquio en la que podrán exponer sus inquietudes en temas de alimentación, que serán atendidas por profesional Nutricionista, Responsable del Departamento de Nutrición de COES.
CONSEJOS DE LOS EXPERTOS SOBRE LA ALIMENTACIÓN DE LOS ESCOLARES
VICTORIA BUENO
Una de las empresas decanas en la restauración en Alicante, COES, con 35 años de experiencia, organiza estar tarde a las 18.00 horas en el salón de actos del Club INFORMACIÓN una charla-coloquio par orientar y aconsejar sobre la mejor manera de alimentar a los escolares tanto en el colegio como después en sus casas. Presentada y moderada por Adrián Martínez, presidente de la Asociación para el Estudio de las intolerancias Alimentarias y Ambientales, la charla contará con la participación de Maribel Botella, gerente de la citada empresa; Pablo Ortiz, nutricionista escolar de la firma; y Mayo Leal, responsable de proyectos de COES.
Comer y comunicar
La gerente explica que su empresa se ha comprometido no sólo a dar de comer adecuadamente a los estudiantes, sino a «comunicarlo» también de forma correcta por un futuro saludable para nuestros hijos «porque desgraciadamente tenemos el primer puesto en obesidad infantil». La forma de alimentarse tiene mucho que ver con futuros riesgos de padecer colesterol, hipertensión o infartos«, advierte Botella.
COMER BIEN PARA RENDIR MÁS
JUANI HERNÁNDEZ
«Mientras medio mundo se muere de hambre, el otro medio se muere por las enfermedades derivadas de los excesos en la mesa», recordó Pablo Ortiz, nutricionista de la empresa COES, que lleva 35 años preparando menús escolares en Alicante, durante la charla que ofrecieron ayer en el Club INFORMACIÓN con consejos de alimentación saludable para padres, con un objetivo: que enseñen a comer bien a sus hijos.
Los expertos de COES son los responsables de los menús que a lo largo de 145 días toman los escolares en los comedores de una treintena de colegios alicantinos. «Si hacemos que coman fruta y verdura pero en casa no se cumple durante el resto del año, no sirve de nada», insistió Ortiz, quien recomienda elevar las tres piezas de fruta y dos de verdura que se deben tomar en una dieta saludable a siete piezas diarias. Y, además, considera que los niños beben poca agua y se sigue consumiendo demasiada grasa, a imitación de los mayores, lo que con el paso de los años contribuye a crear «la curva de la felicidad», un aspecto socialmente aceptado contra el que se debe luchar, según indicó Mayo Leal, responsable de proyectos de la empresa de restauración.
Los dos especialistas y Adrián Martínez, presidente de la Asociación para el Estudio de las Intolerancias Alimentarias, ofrecieron las claves para que los escolares, cuando crezcan, se lleven las maletas cargadas de hábitos saludables. La primera regla es desayunar siempre y de forma equilibrada. «Si el niño se acuesta a las nueve, se levanta a las siete y no desayuna, está más de quince horas sin comer, y le falta gasolina». Aquí, dijeron, lo recomendable es desayunar en familia, y para ello la clave es adelantar el despertador 15 minutos o dejarlo todo preparado por la noche, un hábito que deberían recuperar muchos adultos españoles para los que el desayuno es «el café y un cigarro».
Otras recomendaciones son observar a los niños desde pequeños, lo que permitirá detectar trastornos como la anorexia o la bulimia; prepararles comidas variadas; evitar que la mesa se convierta en un campo de batalla, y modelos dañinos para el menor como el de los «tres bocados»: uno en la boca, otro en mano y otro preparado en el plato. Y, por último, evitar el estrés al comer, dejar a los más pequeños participar cortando frutas y verduras, y permitirles que aprendan lo que les gusta y lo que no, respetando las fobias.
PABLO ORTIZ:
Nutricionista escolar de la empresa COES:
«HAY NIÑOS PARA QUIENES EL TOMATE ES ALGO EN UN BOTE ROJO»
Entrevistado por VICTORIA BUENO
¿Hay alimentación propia para adultos y otra para niños?
Los niños, por su etapa de desarrollo, necesitan nutrientes y las raciones deben ser distintas de las de los adultos, aunque la comida es similar. Pensamos erróneamente que tienen que tener una alimentación muy peculiar, pero, en realidad, es muy parecida.
¿Debe forzárseles a comer?
Pretendemos que coman platos como los nuestros, pero el niño va a comer lo que necesita, siempre que no se encuentre enfermo. Si la comida es equilibrada, la cantidad que coma no es un problema.
¿Cuál sería una comida equilibrada?
El modelo de las cinco comidas. Para desayunar, un lácteo, un cereal y una pieza de fruta; para la comida, similar a lo que se marca en las minutas de los comedores escolares, una ensalada, que también puede ser la guarnición del segundo plato de carne o pescado, y de primero legumbres, arroz o pasta; para merendar, un lácteo y una pieza de fruta; y para cenar, complementar lo que se ha comido a lo largo de día con una verdura cocida, huevo, carne o pescado, con un poquito de pan y una pieza de fruta. Está claro que uno de 16 años no puede comer el mismo plato que el de cuatro.
¿Acertamos si cambiamos la fruta por zumos?
Puede ser un recurso en un momento dado, pero faltan nutrientes y beneficios, además de que la fruta es saciante y permite no ingerir tanta comida. Al colar el zumo, las vitaminas y minerales de la fruta se pierden , mejor si no se cuela el zumo.
Y los más mayores, ¿tienen que renunciar a los fritos o el choricito?
Nos gusta decir que no hay alimentos buenos o malos, lo que importa es la frecuencia con la que los ingerimos. Una vez a la semana, en pequeñas cantidades, no hacen daño.
¿Hay algo que sigamos erre que erre haciendo mal?
Lo peor es no desayunar y cada vez está más extendido. Solemos hacer tan solo dos comidas al día y las frutas y verduras van en descenso porque no tenemos tiempo ni para comprar, ni para cocinar, ni para hacer ejercicio y la alimentación es menos sana.
¿Y comprar platos cocinados?
Quizá sea el mejor recurso frente a la falta de tiempo, si se completa con ensalada y fruta.
¿En qué fallamos?
Perdemos nutrientes y que las generaciones más jóvenes conozcan qué es un champiñón, porque ahora sólo saben que es algo laminado, o el calabacín, que lo intuyen como algo en crema, y el tomate, como algo en un bote rojo. No saben qué forma tienen y eso lo provocamos por no entrar en la cocina.
¿Qué papel tienen los padres?
Los niños, según nuestra experiencia de 35 años, no siguen la tendencia del comedor escolar en su casa. Hacemos hincapié en que coman ensalada y el fin de semana, ni la prueban. Está bien que elijan alimentos, pero habría que negociar para que también coman lo que nosotros les digamos y no limitarse a hacerles otra cosa cuando no les gusta algo.