INTERVIENEN:
SEBASTIÁN GARCÍA RAJA. Comisario-jefe provincial del Cuerpo Nacional de Policía
MIGUEL HERRERO YUSTE. Magistrado del Juzgado de lo Penal número 2 de los de Alicante
FELIPE BRIONES VIVES. Fiscal de la Audiencia Provincial
CARLOS GÓMEZ DE RAMÓN OÑORO. Inspector-jefe de la Policía Local de Alicante
JOSÉ EMILIO SANCHIS CLEMENT. Presidente de la Asociación de Vecinos «La Prosperidad», del barrio de San Agustín
JOSÉ MARÍA ALBERT LINARES. Vicepresidente de la Asociación de Comerciantes «Corazón de Alicante»
MODERA:
JOSÉ MARÍA PEREA. Periodista
EL DEBATE SOBRE LA APLICACIÓN DEL «PLAN BELLOCH» CONSTATA QUE HAY MÁS VOLUNTAD QUE MEDIOS
MERCEDES GALLEGO
El comisario jefe provincial, Sebastián García Raja, fue el primero en tomar la palabra y por poco la suelta. En su intervención insistió hasta el agotamiento en que el lema del «plan Belloch» se centra en acercar la Policía a los ciudadanos, en la necesidad de que éstos cooperen denunciando los delitos y en que, aunque la plantilla es importante, no lo es menos la dedicación y la preparación de los agentes.
García Raja, al igual que luego le pasó al jefe de la Policía Local, Carlos Oñoro, consiguió que el auditorio se perdiera con las cifras que ofreció. Según sus palabras, lo importante es la prevención pero es precisamente de este departamento del que han salido los agentes que han pasado a ocuparse de la atención al ciudadano. Habló de patrullas de a pie, de zetas y de motos que luego, al final, sumando todos los medios, arrojan un total que queda lejos de lo que necesita Alicante si se pretende aplicar el espíritu del plan.
Oñoro no varió en mucho este discurso. Repitió que la calidad es más importante que la cantidad, recalcó el valor que tiene proporcionar una sensación de seguridad al ciudadano y le faltaron palabras para elogiar la colaboración con la Policía Nacional puesta en marcha en el 091, es decir -eso no lo explicó-, un agente de la Local que desvía las llamadas que llegan a la sala y que competen a este Cuerpo.
Los judiciales
Frente a la vertiente policial del plan, el magistrado Miguel Herrero Yuste y el fiscal Felipe Briones tenían el cometido de aportar la judicial, pero se limitaron a tocarla de refilón.
El juez, lejos de entrar de lleno en los polémicos juicios rápidos y en la posibilidad o no de llevarlos a cabo en Alicante contando con los medios con los que se cuenta, pidió colaboración a los ciudadanos para que acudan a los tribunales cuando sean citados y solicitó dinero, no para informatizar los juzgados o para ampliar una plantilla que a todas luces se ha quedado pequeña, sino para pagar las dietas de estos testigos.
El fiscal Felipe Briones hizo suyos los planteamientos del último congreso de Jueces para la Democracia y, tras preguntarse en voz alta sobre la utilidad del Derecho Penal -algo que él puso en duda- se refirió al GAL, a la corrupción, a los fondos reservados, a la unión de Interior y Justicia y a «la industria del control del delito» -cárceles y plantillas de la administración de Justicia- para reivindicar alternativas a la prisión y sacar del Código Penal una serie de delitos.
Los ciudadanos
A José Emilio Sanchís, que habló en nombre de los vecinos de San Agustín, se le notó preocupado por la delincuencia que azota este barrio pero, aún así, se manifestó con sensatez y pidió con humildad que se le explicara por qué los delincuentes que son detenidos por la mañana están de nuevo en la calle por la tarde.
Sanchís no obtuvo una respuesta clara. Los juristas señalaron que la prisión preventiva es una medida excepcional y que, cuando se trata de un delito menor, sólo se aplica si causa alarma social, una situación, que según el alcalde, sí se está dando en San Agustín.
El portavoz de Corazón de Alicante aprovechó para pedir más policías para el centro de la ciudad.
Las intervenciones del público demostraron que éste es un tema que despierta preocupación.