Entrada libre
DIRECTOR DE LAS JORNADAS
Dr. José Luis Micol Molina. Catedrático de Genética, Universidad Miguel Hernández
INTERVIENE:
Dr. Bernat Soria Escoms. Catedrático de Fisiología, Universidad Miguel Hernández
Ciclo de conferencias sobre el impacto científico y social del descubrimiento del ADN
Hoy lunes se inicia en el salón de actos del Club INFORMACION (Avda. Dr. Rico, 17-Alicante) la Semana de la Doble Hélice, organizada por el Instituto de Bioingeniería de la Universidad Miguel Hernández (UMH). Hasta el próximo viernes, día 28, se desarrollarán cinco conferencias sobre el impacto científico y social del descubrimiento de la estructura del ADN en 1953. Todos los actos se iniciarán a las 20 horas y el acceso a los mismos es libre.
Las conferencias, por su contenido, son de interés tanto para profesionales de la Medicina y la Biología como para estudiantes y público en general, dado el carácter didáctico de las mismas y que las exposiciones se harán utilizando los modernos medios audiovisuales de presentación.
El descubrimiento hace cincuenta años por Watson y Crick de la estructura del ADN, la conocida por «doble hélice», está siendo motivo este año de numerosas conmemoraciones. En estas jornadas se trata de conocer y difundir las enormes consecuencias que en la medicina, la agricultura y la sociedad en general tuvo tal avance científico. El Instituto de Bioingeniería de la UMH ha invitado a especialistas en diversos campos.
La primera conferencia correrá a cargo del director del Instituto de Bioingeniería de la Universidad Miguel Hernández, el profesor Bernat Soria Escoms, quien hablará sobre «Células madres, embriones y clonación». El profesor José Luis Micol, de la División de Genética del Departamento de Biología Aplicada de la UMH, presentará al conferenciante y el contenido de toda la Semana en su calidad de director de las Jornadas.
El martes será el doctor Javier Sampedro Pleite, periodista especializado en temas médicos en las páginas de «El País» (Madrid) y que entrevistó hace pocos días al codescubridor James Watson, quien hablará sobre «Lingüística del ADN». Francisco García Olmedo, catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad Politécnica de Madrid, lo hará el miércoles sobre «La tercera revolución verde», es decir, sobre las repercusiones de aquel descubrimiento en la agricultura. El jueves lo hará el catedrático de Genética de la Universidad de Sevilla, Enrique Cerdá Olmedo, sobre «Cincuentenario, centenario y otros recuerdos». Y cerrará las jornadas, el viernes, Manuel Atienza, catedrático de Filosofía del Derecho de la Universidad de Alicante, con una conferencia sobre «Ética y genética». Tras todas las intervenciones se abrirá un coloquio para responder a las preguntas del público asistente.
Bernat Soria afirma que la bioingeniería es la vía para dar calidad al último tramo de la vida
La bioingeniería no nos da la inmortalidad pero si nos aporta calidad en el último tramo de nuestra vida». Esta fue una de las consideraciones que Bernat Soria, catedrático de Fisiología y director del Instituto de Bioingeniería dependiente de la Universidad Miguel Hernández (UMH), realizó ayer en la conferencia inaugural sobre «células madre, embriones y clonación» con la que arrancó el programa de la semana científica que sobre el ADN se celebrará hasta el próximo viernes en el Club INFORMACION.
Previamente a la intervención de Soria, el rector de la Universidad Miguel Hernández, Jesús Rodríguez Marín, introdujo las jornadas con una loa al descubrimiento, el 23 de abril de 1953, de la estructura del ADN y a lo que esto ha supuesto en diversos campos. Para el rector de la UMH «la doble hélice es uno de los episodios más espectaculares y más interesantes y uno de los hitos científicos del siglo XX» y «tiene el asombroso valor de icono, algo que no se había conseguido antes». En su opinión este descubrimiento fue «el comienzo de una revolución biológica».
Por su parte, José Luis Micol Molina, catedrático de Genética y director de las jornadas, indicó que «gracias a las dos hebras que se enrollan como una escalera de caracol» se puede hablar del genoma humano, la curación de algunos tipos de cáncer, personalizar el tratamiento de patologías, facilitar las investigaciones policiales o llegar a conseguir los alimentos transgénicos.
El profesor Soria desarrolló su conferencia en tres partes. Explicó que la investigación con células madre nace de la necesidad de investigar tratamientos más definitivos a patologías como la diabetes que aparece cuando no funciona la célula que genera la insulina.
Bernat Soria y su equipo trabajaron durante seis años en la creación de células beta artificiales basándose en la introducción de ADN en otra célula para así crear insulina. Esto no funcionó porque «va a ser muy difícil hacer una célula B a partir de una A que no conocemos», explicó el experto en Fisiología.
Apuntó que las células madre o troncales permiten la creación de otras ramas que dan lugar a otros tipos celulares. Tienen la capacidad de autorenovación, se diferencian en otros tipos celulares y tienen la capacidad de repoblar un tejido. Por ejemplo, en un trasplante de médula ósea se reproducen las células aunque no se conozca cual de ellas es la madre, destacó.
Explicó que este tipo de células están en los embriones, en fetos (procedentes de interrupciones voluntarias del embarazo) y en adultos, aunque en estos dos casos «las células son limitadas porque están comprometidas». «La salida, dijo, está en las células embrionarias aunque el problema está en que se desconoce el camino que hay que recorrer desde una célula madre embrionaria a una célula beta».
Las células madre del adulto están el hígado, el epitelio intestinal o el pelo. «Se puede cultivar piel pero no tiene pelos, ni glándulas sudoríperas. La proliferación y la diferenciación no está resuelta» concluyó el catedrático de Fisiología antes de asegurar que existen propiedades compartidas de cualquier célula madre, independientemente de donde provengan.
Acto seguido se preguntó lo que pasaría si hubiera una célula madre que fuera la madre de todas las células.
Reprogramar células
Sobre la clonación, dijo que desde el punto de vista biológico lo interesante es sacar células madre que se reprogramen. Aseguró que la oveja Dolly fue caso que tuvo éxito junto a 400 fracasos. «Lo que podemos aprender es cómo reprogramar la información que hay en el núcleo si sabemos mediante qué mecanismos».
En opinión del director del Instituto de Bioingeniería «el problema no es el órgano sino los factores que hacen que este se reprograme».