Por el Taller de Teatro de Aulas Culturales de Tercera Edad de Alicante, bajo la dirección de Amor Zapata y Esther Zapata
TALLER DE TEATRO DE AULAS CULTURALES DE TERCERA EDAD DE ALICANTE
Dirección: Amor Zapara y Esther Zapata
Intérpretes:
BERNARDA: Mª Teresa Marín
PONCIA: Gloria Blasco
ADELA: Menchi Cañizares
AMELIA: Leonor Bellod
MAGDALENA: Carmen Cremades
MARTIRIO: Pepa Seva
ANGUSTIAS: Librada Fraile
Mª JOSEFA: Dolores García
CRIADA: Pepe Sáez
PRUDENCIA: Noemi Arocas
MUJERES: Mari Carmen Sánchez, Dorita Villaplana, Mª Inés Valls
POEMAS:Pepe Villegas
La casa de Bernarda Alba es una obra teatral en tres actos del escritor Federico García Lorca, escrita posiblemente en 1936.
La obra cuenta la historia de Bernarda Alba que, tras haber enviudado por segunda vez a los 60 años, decide vivir los próximos ocho años en el más riguroso luto. Quizá el rasgo más destacable sea su fanatismo religioso. Con ella viven cinco hijas: Angustias, Magdalena, Amelia, Martirio y Adela.
Sin personajes masculinos en escena. El apellido de las mujeres de la obra es simbólico y significa castidad.
Las Aulas de Tercera Edad estrenan un montaje de «La Casa de Bernarda Alba» en el Club INFORMACIÓN
El Taller de Teatro de las Aulas de Tercera Edad de Alicante estrena esta tarde, a partir de las 20:00 horas, La Casa de Bernarda Alba, de Federico García Lorca, en el Club INFORMACIÓN (avenida Doctor Rico, 17). El montaje, bajo la dirección de Amor Zapata y Esther Zapata, es el fruto de las actividades formativas desarrolladas durante el curso pasado en el marco del taller teatral de las aulas, en las que participan alumnos mayores de 50 años.
La elección del texto de García Lorca, quien definía esta obra como “poesía que se levanta del libro y se hace humana”, representa un reto para la compañía teatral, ya que supone una incursión en un registro escénico dramático alejado del repertorio costumbrista habitual.
La obra cuenta la historia de Bernarda Alba que, tras haber enviudado por segunda vez a los 60 años, decide vivir los próximos ocho años en el más riguroso luto. Con ella viven cinco hijas: Angustias, Magdalena, Amelia, Martirio y Adela. La ausencia de personajes masculinos en escena, el trasfondo histórico y social, con una visión crítica del fanatismo religioso, y su dimensión realista y comprometida han hecho de ella una de las obras cumbres de la dramaturgia contemporánea.
Las Aula de la Tercera Edad son entidades colaboradoras de de la Conselleria de Cultura y Deporte, que tiene como finalidad la formación integral de las personas mayores desde un enfoque activo y participativo. Su programa formativo incluye tres áras educativas: cinencias y humanidades, actividades físicas y plásticas y creativas. En esta última se enmarca la labor del taller de teatro que esta noche presenta su último montaje en el Club INFORMACION.
Análisis
La casa de Bernarda Alba es considerada por algunos críticos como una tragedia, y por otros como un drama, siguiendo la opinión del propio autor. Muchos han opinado que es la culminación de un largo proceso evolutivo del dramaturgo, desde el modernismo al vanguardismo y de ahí a su fase de plenitud. Hay que resaltar en primer lugar su concepción del teatro. Rechaza el teatro burgués de Jacinto Benavente, pues su único fin es lucrativo. Tampoco le agradaba, especialmente al final, el verso. Esto no quiere decir que rechace la poesía en el teatro, más bien la personaliza. En cambio muestra su simpatía por el teatro popular o marginal: el guiñol, el vodevil, etcétera.
Posiblemente, las frases que mejor aclaran su idea sobre el teatro son éstas, formuladas en 1936 cuando leía a sus conocidos La Casa de Bernarda Alba:
El teatro es la poesía que se levanta del libro y se hace humana. Y al hacerse, habla y grita, llora y se desespera. El teatro necesita que los personajes que aparezcan en escena lleven un traje de poesía y al mismo tiempo que se les vean los huesos, la sangre.
Muestran estas palabras la dimensión humana del teatro en la que debe el lector sentir como los personajes a lo que ayuda el tratamiento realista de la obra.
Planteamiento
Tras la muerte de su segundo marido, Antonio María Benavides, Bernarda Alba decide recluirse y guardar rigurosísimo luto, tanto ella como sus cinco hijas. El luto es roto por la llegada de Pepe el Romano, que pretende a la mayor, Angustias. Si bien es una costumbre real, Lorca lo retrata insinuando que además de ser “un drama de las mujeres en los pueblos de España”, tiene también la intención de documental fotográfico. La obra comienza con la entrada de las sirvientas hablando del despotismo de Bernarda y con la llegada inmediata de esta, confirmando su riguroso trato a ellas y sus hijas, e imponiendo silencio. Cuando la hija mayor hereda una fortuna grande que atrae a un pretendiente (Pepe el Romano), celos y pasiones se desatan en la casa, desembocando en un final trágico con la muerte de la más joven, Adela, quien no quiere someterse a la voluntad de su madre. Bernarda finaliza la obra diciendo que su hija ha muerto virgen, así mostrando su preocupación social, la cual es más importante que la muerte de su hija.